Primeros pasos hasta una empresa madura.
El proyecto de ferretería mayorista implementado por Pablo Dargoltz empezó a dar furtos. No fue fácil claro, pasar de un modelo de negocio a otro requería mucho cambio y tiempo de maduración. Otro nivel de inversión, otras técnicas de venta y necesidades de logística y distribución propias.
El inicio de DebyFerr Mayorista Ferretero como hoy lo conocemos fue en Alta Córdoba, especificamente en la calle Rivadavia casi Bedoya, donde adquirimos un gran galpón para poder empezar a estoquear materia prima. Ya no eran solamente Pablo y Liliana, su mujer, sino que además empezaron a prestar servicios activamente Javier y Debora, sus hijos y 2 amigos que siguen hasta hoy: Hugo y Walter.
El negocio creció, la demanda se activaba con frecuencia y tuvimos que empezar a organizarnos internamente para conseguir optimizar los procesos. Habilitamos oficina dentro del galpón para administración, compra y venta. Y años más tarde, con una necesidad de expandirnos empezamos a trabajar con viajantes. «Los viajantes nos permitían expandirnos, generar otro tipo de negocios y dar cierta regularidad a un negocio que tenía sus estacionalidades», cuenta Javier, titular de DebyFerr.
Pasaron los días, años, décadas. Aprendimos mucho del rubro, crecimos y también tuvimos nuestros tropiezos en un país que nunca fue fácil para la estabilidad. Capitalizamos la experiencia en esos años para optimizar procesos, mejorar el servicio y crecer con solidez. Desde 1980 habían pasado 38 años; ya estábamos en 2018 y la próxima gran etapa de la empresa estaba llegando. Decidimos expandirnos y pare de esa expansión involucraba una importante jugada. Nos estábamos por mudar.
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